En la furia de los vientos se encuentra la fuerza y la Luz, que nos derrama la Creación para ponernos en el sitio que nos corresponde, habilitando para nosotros lugares y conocimiento, por todo ello debemos irradiar como lo que somos con inaudita ternura, para con nuestras alas acariciar al mundo en constante Creación, dando gracias siempre al Creador por haber hecho tanta hermosura, pues aun en la tormenta se encuentra esa fuerza y esa Luz que aunque a veces asusta, solo es una réplica del afán de supervivencia de toda lo Creado con autentica pasión, regalando Amor, Paz y Luz, como nos regala el Creador, que aun sabiendo cómo afecta la tormenta al entorno, deja libre a los vientos, para que la fuerza y la Luz penetre hasta el fondo de las almas que están en etapa de experimentación, desvelándoles aun tiempo que no es miedo ni terror, lo que debe despertar en nosotros la tormenta, solo es energía fluyendo en completa armonía, parece que es lo contrario, pero no amig@ no, solo es un reajuste de la compleja Creación y como tal debemos recibirla, ahuyentando todo temor, porque la Fuerza y la Luz siempre están a nuestro alrededor, para protegernos y hacernos valedores del Total, de ese Todo que insiste en la nueva Creación, más autentica, más armónica, en definitiva, más unión entre todo lo Creado por el Núcleo Creador. Gracias infinitas doy a ese Centro Divino que me regalo la opción de poder dirigirme a ti para contarte como yo, estoy en esa tormenta, en la fuerza y en la Luz, al igual que tú mi herman@, porque somos lo Creado a la vez que el Creador. Bendiciones añadidas a este relato de amor, que intenta subrayar la descripción de la completa Creación, Infinita y Eterna, en la que estamos tú y yo. Inés.
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